Consideraciones sobre el soporte de ventilación mecánica durante el traslado de pacientes

Nelson N. Algarra, MD, Nikolaus Gravenstein, MD

La ventilación durante el traslado de pacientes no es una tarea que debe tomarse a la ligera y, según informes, conlleva algún tipo de complicación en un 10 % a 31 % de todos los casos.1,2 Aunque los motivos de preocupación sobre la seguridad del paciente durante su traslado mientras está intubado son similares a los que surgen en el quirófano, la logística de cómo ventilar y controlar al paciente intubado durante el traslado es única. Como señalaron Gerasimov y Toor en el informe anterior, los dispositivos que se usan para la ventilación durante los traslados pueden ocasionar consecuencias no deseadas.3 En el quirófano, los profesionales de la anestesia tienen todos los recursos necesarios para manejar la ventilación de manera segura, como ventilación manual y mecánica, monitores y alertas de los pacientes, aspiración y la ayuda de otros colegas en caso de emergencias. Durante el traslado de pacientes, estos recursos son más limitados, y se presenta la dificultad adicional de tener que empujar la cama por los pasillos y hacia los ascensores.

Mayor seguridad en los traslados con la selección de dispositivos y el control

Los Dres. Gerasimov y Toor describen un caso en el que una obstrucción significativa del flujo de aire espiratorio provocó actividad eléctrica sin pulso (AESP) debido a la presencia de secreciones en un filtro que se puso sobre la válvula espiratoria de un dispositivo manual de reanimación.3 Una obstrucción de un filtro que está conectado directamente al tubo endotraqueal o a cualquier otra parte inferior de la trayectoria del flujo espiratorio es posible en cualquier circuito de ventilación y siempre es un factor que se debe tener en cuenta cuando la presión de las vías respiratorias es elevada. También puede haber una obstrucción en el tubo endotraqueal. En el caso mencionado, la solución que se implementó para evitar que el filtro se volviera a obstruir e impidiera la espiración fue usar un protector para desviar las secreciones exhaladas en vez de un filtro que se pudiera obstruir. Esto sin duda resolvería el problema de la obstrucción en el filtro del circuito de ventilación, pero no impide la contaminación del entorno y del personal.

Según nuestro sentido informal, los traslados de pacientes inestables dentro de un hospital entre el quirófano y la unidad de cuidados intensivos se hacen cada vez más con un respirador portátil de algún tipo y personal de terapia respiratoria presente, cuando hay recursos disponibles. Esta opción podría ser la más segura para el traslado siempre que haya un suministro de oxígeno adecuado. En el caso de los pacientes que permanecen intubados para controlarles las vías aéreas, pero que por lo demás están clínicamente estables, el tipo de dispositivo a usar depende de la preferencia del profesional o de los protocolos de la institución. Ambos sistemas tienen ventajas y desventajas (tabla 1). Aparentemente, hay un aumento del uso habitual de los respiradores portátiles a medida que se vuelven más accesibles.

Tabla 1: Comparación de dispositivos que se usan habitualmente como soporte de la ventilación durante el traslado*

Dispositivo portátil Ventajas Desventajas
Bolsa autoinflable (tipo AMBU®)
  • Puede ventilar aunque falle el suministro de gas
  • Liviana, fácil de usar
  • Dispositivo conocido
  • No tiene indicación visual de inspiración o espiración: es más difícil detectar problemas con el suministro de gas
  • El control de la inspiración y la espiración no es estándar
  • El menor nivel de cumplimiento del dispositivo de reanimación puede complicar el cumplimiento de la detección de cambios en el paciente
  • El volumen corriente varía
  • La frecuencia respiratoria varía
Circuito tipo Mapleson
  • La inspiración y la espiración se pueden detectar manualmente
  • Tiene indicación visual del trabajo respiratorio del paciente
  • Requiere un suministro de gas comprimido
  • Los volúmenes corrientes suministrados dependen del flujo de gas y de la configuración de la válvula de límite ajustable de presión (Adjustable Pressuring Limiting, APL)
  • El control de la inspiración y la espiración no es estándar
  • El volumen corriente varía
  • La frecuencia respiratoria varía
Respirador portátil
  • La ventilación es estable y fiable
  • Operación con manos libres
  • El control de la interacción-
    entre el paciente y el respirador está incorporado en el dispositivo
  • Requiere muchos recursos, tanto dispositivos como personal capacitado
  • Requiere un suministro de gas comprimido
*El uso de la capnografía durante el traslado reduce muchas de las desventajas de los dispositivos de ventilación autoinflables y portátiles Mapleson

La lección del caso clínico es que todo lo que se agregue a un circuito de ventilación que pueda obstruir la espiración puede ocasionar un colapso hemodinámico y otros problemas4, por lo que el control de la ventilación manual es útil para detectar cambios antes de que se vuelvan significativos. Tal vez con la debida experiencia se podrían detectar las obstrucciones espiratorias con mayor facilidad con un circuito del sistema Mapleson, aunque todavía se debe comprobar. En el caso de la ventilación manual, es fundamental evaluar continuamente los parámetros respiratorios con un control visual y táctil del circuito elegido. Algunos dispositivos manuales de reanimación incluyen un manómetro de presión de las vías respiratorias para ayudar a controlar el proceso de ventilación. Por último, el uso de la capnografía durante el traslado es muy posible y permite evaluar la inhalación y la espiración. Si se alcanza un volumen de espiración viable, la concentración de dióxido de carbono al final de la espiración puede confirmar una ventilación adecuada.

 

El Dr. Algarra es profesor auxiliar de Anestesiología y subdirector del programa de Operaciones Clínicas del Departamento de Anestesiología en la Facultad de Medicina de University of Florida, en Gainesville, FL.

El Dr. Gravenstein es profesor de Anestesiología, Neurocirugía y Periodoncia del Departamento de Anestesiología en la Facultad de Medicina de University of Florida, Gainesville, FL.


Ninguno de los autores tiene conflictos de intereses en relación con este artículo.


Referencias

  1. Parmentier-Decrucq E, Poissy J, Favory R, et al. Adverse events during intrahospital transport of critically ill patients: incidence and risk factors. Ann Intensive Care. 2013;3:10.
  2. Winter MW. Intrahospital transfer of critically ill patients; a prospective audit within Flinders Medical Centre. Anaesth Intensive Care. 2010;38:545–549.
  3. Gerasimov M, Toor J. PEA arrest during transport of a ventilated patient due to a clogged respiratory filter on Ambu® Bag. APSF Newsletter. 2019;34:46.
  4. Espay AJ. Neurologic complications of electrolyte disturbances and acid-base balance. Handb Clinic Neurol. 2014;119:365–382.

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